miércoles, 24 de junio de 2015

Votum

Tengo tantas ganas de poder mirarte fijamente a los ojos y decirte que ya paso, que ya lo supere, que ya no me dueles, que ya fuiste y ya no serás.


Tantas ganas de abrazarte con el único fin de decir "adiós, se termino, ya no va mas". De apretarte fuerte y marcar en tu espalda un "hasta pronto" oculto en mis malas decisiones y falsas despedidas.

Tantas ganas de que mi boca ya no busque a tu boca y todos los besos pendientes se ahoguen en el mar de la aceptación, sin renegar, sin rogar una sola oportunidad mas.

Tantas ganas de que mis manos puedan posarse en tu cuerpo sin que se desate ninguna guerra, sin que mi piel llame a tu piel, sin que mis dedos sientan la desgarradora necesidad de entrelazarse con los tuyos, de dibujarte esperanzas en cada rincón olvidado y urgente de vida.

Tantas ganas de tener control sobre mis pasos y no voltear a ver si ya caminas en otra dirección cuando me vaya o si me sigues para pedirme que me quede.

Tengo tantas ganas de ya no regalarte una sola sonrisa mas, una sola lagrima mas, una sola oportunidad mas, un solo rastro mas de mi existencia marcada entre tanta distancia.

Tengo tantas ganas de que las ganas se vuelvan decisión. De que se cumplan las promesas que me he hecho a mi misma. De que por fin pueda arrancarme el puñal que me clavaste en el alma y el dolor cese.

Tengo tantas ganas de ya no sentir, de ya no amarte tanto y solo logro amarte un poco mas. Verte a los ojos y rogarle al mundo que solo me vean a mi. Rodearte con los brazos y convertirte en mi hogar, que tu boca se torne mi boca y me robe incluso las palabras, que mis manos y mis dedos y cada partícula de mi ser y cada latido y cada respiro y cada temor y cada falta de decisión se enamoren un poco mas de ti.

Tengo tantas ganas de poder mirarte fijamente a los ojos y decirte que ya paso, que ya lo supere, que ya no me dueles, que ya fuiste y ya no serás. Pero se que no ha pasado, que no existe superación, que no existe herida curable y que fuiste, eres y siempre seras.